Page 391 - José de la Riva Aguero - Vol-2

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
Vida y obra de José de la Riva Agüero

Recivida y contestada en 29 del mismo.
Excelentisimo Señor don José de la Riva Agüero
Cuzco Setiembre 18 de 838
Mi querido compadre.
He recibido dos cartas de Usted fechas 2 y 6 del corriente. Estoy muy
satisfecho del buen aspecto que ofrecen los negocios del Norte y de las me-
didas que Usted dicta para aumentar nuestras ventajas. Lo que importa sobre
todo es que Usted estienda su accion a los Departamentos del Norte, enviando
Jefes de confianza que exiten el entuciasmo de aquellos pueblos y alienten los
animos propagando noticias sobre la superioridad de nuestras fuerzas y la
decision con que todos se disponen a colaborar contra los invasores. No omita
Usted medio alguno que pueda conducir al logro de este interesante objeto.
La conservacion del Castillo merece tambien la primera atencion,
pues sabe Usted que si los enemigos llegasen a apoderarse de él, la guerra se
prolongaria mucho. Es preciso pues sostener con todo esfuerzo el animo de
los Jefes del Callao, inspirandoles confianza y proporcionandoles todos los
recursos posibles. Valgase Usted de cuantos arbitrios esten a su alcance para
hacerles conocer lo ventajoso de nuestra proposicion, lo respetable de nuestra
fuerzas, y lo fácil que nos va a ser dar a los Chilenos un golpe pronto y seguro.
Remitales Usted tambien cartas de crédito para los extranjeros, para que con
ellas puedan obtener los auxilios que necesiten.
No es posible remitir a Usted los fusiles que me pide, pues apenas po-
demos entendernos con la conduccion de ropa, dinero y otros articulos por
el mal estado de las postas. Seria bueno que Usted pidiese armas a nuestros
amigos de Lima.
Yo no pienso detenerme aqui sino hasta acabar de hacer algunos arre-
glos, y remitir a Ustedes todo lo necesario para la campaña. Entretanto doy tam-
bien lugar a que se reuna el Ejercito y que Ustedes adelanten los preparativos.
El estado de la opinion en estos pueblos es admirable. La defeccion de
Orbegoso ha sido ciertamente el medio mas poderoso que se podia desear para
reunir el voto jeneral en favor de la causa y consolidar firmemente la suerte del
Perú. Ya no tenemos que luchar si nó contra los miserables Chilenos.
Pronto satisfaré el deseo que tengo de abrazar á Usted y mientras se
ofrezca otra oportunidad de escribirle, me despido siempre su afecto amigo y
compadre.

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