Page 67 - Debate Constitucional 1978 - Tomo IV
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de los pne¡los  Fodlln   ir  abriendo  poco  dezr y  no ssnos  paslo de las pasiones
               a  poco sus nuevas scndás  y  su  nn¡ús    injclas que  iantas rcc¿s ag!¡robn  el al-
               derrotcros  J   quc vio rcn!ñr  !  csa Al+  ná  y  .os  inpiden apr.ini¡¡os.
               mania desrruida  (por I's  tuez¿s que la      Y  dc  ah1  que  loy  como  iyer,  cuando
               Hisroriá ¡os  hizo rer)  dcsdc sus nis      los exr.:mos cmpiezan a movili¿arse  !a-
               nas  ¿nhnás  de destñcción  y  de niná      r¡  dsnruir  el ensryo  dcnac.ático, lcnc
               sc  ¡udo  v*  có'¡o  el !i3jo  Adenaue. no  nros ei derecho tambión  a d.cir ¡ue$a
               quiso .en¿irec. AdenahuBr conó  HaJ.        ¡.j¡b  ra. Nnestos :migos o nücslros con-
               dc Ia  Tor.e, no se                         nacio¡.les de la ultra-d:rc.ha, cs¡án  ha
               licmpo  y  Ilaya  ¿e l.  To¡rc  hoy. Adena.  ji¡ado por s¿rdc¡os  rD poco diliciks pa-
               ucr an!¡dó  que  Al¿nania  r.viviri!,  y    ra hacc¡nos  cons¿nrir  qu¿ la Asamble.
               el ñilagro álemá¡ tue és¿: lá voz, l!  cor  Conrnuycnte !a  a c.¿r; que e*a  asan-
               duct¡  y  la ¿caisión de un  nombrc quc                                       ¡ada y
               ronpió  esFejisnos  ratales de la  slere    bl€a confiruy.nte  no sjde  ¡ara
                                                                                          áp¡osMr
                                                                                    ?ara
               hktó.ica con que el clina  dc la  llern     las torúe¡losas calanidades que  süff¿
               sicuc rod¡via ásolando  r  los  pueblos  a  y  vive  el       Y  nue*ra  rcspuc$a  a
                                                                     ¡ucblo.
               pesar d.  su cuh!.a  y :  p.sa¡  dc su grm-  la ulrradc.¿cha, cs óslá:  Nósokos ma¡-
               dcza.  con  Jápón ocurió  lo mismo; ios     tendrcnos la  j¿rárqúía  dc la Asaútlea
               jaF¡¿scs  despnós de Himshima  y  de
                                                           con*itlycnie,  mant¿n¿rcmos  €1 valor
               Nasssali,  despúés dé  la  ruim  eve¡tual   de su sóbe¡ani¡,  y  seÉmos co¡secucnies
               cn u¡  ¡nticipo  dc la ruiná ¿el mundo,             yoios del pueblo qú¿  nos uncie
               aDrcrdió  ¡  senti¡, a cre¿r  y a saber  que  con los               '.   (Aplausot.
                                                           r¡  cono  .epre$nrartes
               los hon¡res re¡sños d:sri¡o  de  sobrc
               liv¿ncia.  Y asi cono Aleóaniá,  asi cono     señor ?¡esiAentc: Voy  a haa.  ll¿ga.
               el Jápón,  asi cono los viejos  Ne¡los   de  !  la  Mssa la  noción  cuyo fü¡danerto
                                                           á¡ricipado  me i¡¿  pernt¡ido bÍel  Quie
               rendi., por qué  var¡os a úcer qr¿ ra ta    ro,  al  t¿rnin:r  efa  i.lcrve¡ción  rela_
               sedia  quc hoy pesa sobre ¡üeíros  ¡om-     cionad. ¿ftciánente  con Ia posici&  po-
               bros, es lo suficicntemenle         cono    litica de mi  Partido,  exp.¿sa.  que nsda,
                                           Crá¡d3
               par¡ entrega¡nos a la ago¡ia  y  l!  mDe.   ni ¡adic,  pódrá  oblisa. al pleblo del Pe
               te?  Yo cr€o,  queridos  añigos, cn  la !o7  ri  a a¡r¡nra.sc  }asia cl  slicidioi  y er
               d.  Háyá de la Ton¿, qle  c.  su siclo B    cuchando   t   aicndieftlo  l¡  premonición
               p.oduce 1. voz  dc  cleDenccau  cua¡do      nerra  cono  ¡rcsidente de ¡a Asanblea
               en la ¡at¡l  luera   d3l 14 al  13,  or$¡iza  consriruyenk, !anrbién
               Ia 'ictoria  aliad:, contra Aleña¡ia, de    que el ?e¡Lt se sal!a.á.  como  milÍante
               cl3r¡la   sner¡a.l   pesinisno, !l  &rfoiis-  dc nn Partido enhegrdo a  los grandes
                                                                      d:  h  juricir  social, acaso  s
               no,al  ent¡cerismo, a Ia ab!liá,!  lá ociG  Drcpósitos
               si&¿,  a h  .¿sisnació¡. Aqui Hari  &  h    tcngrnos  el  de.ecbo ¿c reco¡dar álCo
               Torc  cnscna a los  j&enes del r¿n:],  ¡or  que ocuni!É  en cl año 1943  en el PaF
                                                           lancnto  i¡elés: Ln joven á¡cia¡o  cono
                                                           ürcd,  senor  PÉsid6te,  de más  de  30
               própia concep.ióD  y  pór n¡st.a  propja años, fuo llanado coño ?renier  a la cá
               fornació¡r  pcrc el PcñL  que  noená  !.¿'  na¡a de  los comlnes cuando  las fu:Eas
               s.nie aqui, el Pcrú  quc crá  lcr.s, en los  :lcmanas casi  habiá¡ dcrruido  lnglai._
                li¡des dd lo  quD  aqui ocuÍc,  sabc  por  ¡¡a, coa¡do las ¡uc¡?ás  nazi_fascislls  s¿
               Itar.  dc la  Tor.c,  como  supo F¡a¡cia  y  ens¿ñor*ba¡ €n roda Europa. la  Cán.-
               supo €ú¡opa por clenenceau,  qne él v.      .¡  de los comunes con todos  sus ñrem
                                                                                                cs
               ? decla.ár csr  su€rra;  y  los aprisras cs  ¡.os, dE la oposició¡  y d.l  eobiemo,
                tmos  dhpueros  a saglirlo cn la    crú    cuchaba el  dk¿ürso  de  preseniación de
               batalla  por la sahación na.ionál,  por  el  wi¡ron  Ch!.chill,  quien  him  ¿l discur-
               oriimisno,  por  d  ¿nlendimienro,  por     so más b¡cve  de su rida y tuvo El apoy.
               que a¡cu¡á rez ¡os aDricemos con  cran      u¡ániñe  dc  Ia  Cámdra:  ofieció  siñpls
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