Page 113 - Diario de Debates-miercoles 5 setiembre 2019

1. Mejora del desempeño educativo.

2. Mejorar los resultados prioritarios en la salud.

3. Reducir la prevalencia de la anemia infantil.

4. Mejora de la calidad de los servicios de justicia.

5. Incremento de la calidad de los programas sociales.

6. Programa orientado a resultados de desarrollo infantil temprano.

7. Reducir la inseguridad ciudadana.

8. Mayor acceso a agua clorada y saneamiento.

9. Mejorar el servicio de mantenimiento de carreteras y así sigue, 11, 12, 13, inversión de
materia digital y tecnología de información.

Estas Presidente, son prioridades sectoriales que los han reunido al azar y colocado en el
proyecto presupuesto, pero eso no es política fiscal.

¿Dónde están los objetivos fiscales? ¿Dónde está el presupuesto como instrumento para
fomentar el crecimiento, el bienestar y el desarrollo? Cómo el presupuesto sirve para
distribuir y redistribuir la riqueza para crear empleo, para reactivar la producción, para
transferir tecnología, para elevar productividad, para multiplicar los ingresos, para crear
mercados, para fomentar la industria, para capitalizar la agricultura, para reducir costos
estratégicos, para dotar de liquidez oportuna para los emergentes, para crear propietarios
peruanos y prosperidad nacional; ¿dónde está el sentido económico del presupuesto?

Este presupuesto es una improvisación, acaso no del Ministerio de Economía y Finanzas
sino de algún club de la construcción, que desde el 2002 o 2003 a parasitado el erario
nacional.

Un presupuesto también, presidente, lamentablemente sin base técnica económica,
tomemos dos de los supuestos macroeconómicos en que se sustentan los cálculos de
ingresos y egresos del presupuesto del sector público para el Año Fiscal 2020, el de un
producto bruto interno de 4% y el de exportaciones de cincuenta y un mil cuatrocientos
millones de dólares.

El Perú presentó este año un débil crecimiento del PBI entre enero y marzo 2,3% que
resulta la mitad del ritmo registrado en los últimos 3 meses del 2018, que es 4,7%; en
abril de 2019 se registró un crecimiento de apenas 0,02% según el INEI. Entonces, la
previsión del supuesto macroeconómico del 4% para el periodo 2020 y 2023 no tiene o
progresivamente pierde sustento.

En todo caso, el sustento del presupuesto debería referirse…

El señor PRESIDENTE (Pedro Olaechea Álvarez Calderón).— Para que siga, un minuto.

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