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La señora CONDORI JAHUIRA (GPDD).— Para finalizar, permítame solicitar la
incorporación de tres proyectos de inversión pública que beneficiarán a un distrito que no
tiene muchos recursos presupuestales. Son los proyectos con los códigos SNIP 280193,
267667 y 184295. Esto ayudará especialmente a zonas pobres que no cuentan con
mayores recursos.

Muchas gracias, Presidenta.

La señora PRESIDENTA (Ana María Solórzano Flores).— Tiene la palabra la congresista
Cecilia Chacón.

La señora CHACÓN DE VETTORI (GPFP).— Señora, Presidenta, el día de ayer y hoy,
durante todo este tiempo en que discutimos el proyecto de Ley de Presupuesto, hemos
escuchado que este gobierno, supuestamente, está tratando de dar medidas para que la
población se vea directamente beneficiada, se reactive el país económicamente, ya que
para nadie es un secreto que vamos de mal en peor en términos de crecimiento
económico.

Se ha dicho que van a disminuir los tributos, que esto hará que el ciudadano de a pie
tenga más dinero en el bolsillo y, por lo tanto, que esto ayudará a la reactivación de la
economía. Se ha dicho que se harán más obras públicas para que se genere más empleo
y una vez más los ciudadanos se vean beneficiados con más dinero en el bolsillo.

Sin embargo, hay normas que el mismo gobierno, a través de los diferentes ministerios e
instituciones, o a través de entidades como la Superintendencia de Banca y Seguros, que
si bien es cierto es autónoma, obviamente hay cosas que son mucho más importantes…
Mientras, por un lado, se nos dice que se nos van a dar facilidades para tener más dinero
en el bolsillo, por otro, se va en contra del ciudadano. Y voy a poner algunos ejemplos
para que veamos que, una de dos, o no se dan cuenta de lo que tienen que hacer o
simplemente hay un doble discurso.

Como objetivo de política pública es claro que lo que se quiere es incrementar la
bancarización para que haya más formalización, por lo que supuestamente se tiene que
dar incentivos, no castigos. Sin embargo, con gran sorpresa vemos que, sin atender a
estos principios de justicia con los que debemos de actuar, la Superintendencia de Banca
y Seguros hace más de un año ha dado autorización a todas las entidades financieras
para cobrar una penalización cuando un ciudadano no paga a tiempo sus créditos o sus
cuentas de las tarjetas de crédito en los bancos, en las cooperativas o en las demás
entidades financieras. El argumento es enseñar una cultura crediticia, pero lo que estamos
haciendo es castigar a todos aquellos emprendedores que a través de su esfuerzo y su
trabajo pueden obtener un préstamo y que cuando se demoran un día o más en pagarlo
no solo le cobran, como es lógico, los intereses y las moras que eso genera, sino,
además, una penalización. Hay bancos que cobran 100, 50 o 25 nuevos soles si te has
pasado un día de no pagar tu deuda.

Esto ha significado, por ejemplo, para un pequeño empresario de San Marcos,
Cajamarca, seis mil nuevos soles de penalización durante todo el año. Esta gente con
gran sacrificio paga sus deudas, porque maneja el día a día sus ventas y con eso paga su

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