Nació el 20 de julio de 1899, en Paucartambo, Cusco. Desde niño aprendió los secretos de la escultura y pintura religiosa, ampliando su horizonte artístico con la muñequería, juguetería, mascarería e imaginería, apoyado por su esposa Marcelina Deza.
La mayor parte de su trayectoria artística la dedicó a la restauración de imágenes religiosas, en Iglesias, Parroquias de la ciudad del Cusco, así como de los del Valle de Lares, Urubamba, Yukay, Huayllabamba, Urquillos, Calca, Chinchero, Huaracondo, Chaquepay, Anta, Urcos entre otros.
Emilio Follana Camacho el artista de las “Manos Celestiales”, recorrió varios departamentos del país, invitado a exposiciones artesanales, habiendo ganado primeros puestos, medallas y menciones honrosas.
El “Niño Manuelito Cholo de la Espina” concebido por el artista Follana, es una imagen de tez trigueña lograda con una pasta hecha a base de plata, ocre amarillo, y púrpura, que se mezcla con una solución de marfil que lleva como complemento el barniz cristalino, secante de aceita de linaza, pupilas de color canela que se acuñan con hojuelas de vidrio.
Fue galardonado con el premio “Gran Maestro de la Artesanía Peruana” el año 1997 |