Page 499 - La Rebelión de Huánuco. Vol 5

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La Rebelión de Huánuco de 1812
Ciudad de Huánuco, que la mandará hacér el Alcalde Ordinario de primer
voto de ella = Gonzales = Juan Bautista Sarria = Huánuco y Junio diez de mil
ocho cientos diez y seis = Por presentado este recurso con el Decreto marginal
del Señor Governador Yntendente de la Provincia que obedezco con el devido
respeto: Guardese y cumplase en todas sus partes, y en su consegüencia citese
con el al Sindico Procurador de esta Ciudad. Así lo obedeci, mandé y firmé
con testigos á falta de Escribano = Manuel Thalancha = Testigo Pedro Tello =
Testigo. José Rodriguez y Arze = En el mismo día cité con el Decreto del mar-
gen de ocho del corriente probeído por el Señor Governador Yntendente de la
Provincia al Sindico Procurador de esta Ciudad Subteniente de Ynfantería
Don Melchor Basaldua, y lo firmó conmigo de certifico = Thalancha = Mel-
chor Basaldua = Don José Gonzales de Prada, Governador Yntendente de la
Provincia de Tarma, y Comandante en Gefe de sus armas, Tropas y fronteras
por Su Magestad etcetera = Certifico en quanto puedo, y ha lugar en derecho:
Que para tomar posecion de mi destino, estando de paso en el Partido Jauja,
impuesto que en la Yntendencia, no había Acesor, por la ausencia del propie-
tario, con licencia Superior solicité Abogado con quien poderme consultar en
los asuntos que ocurrieren, y tomando para el efecto en el transito, y en esta
misma Capital ynformes de personas que me sirbieren de tal Acesor me deci-
di para la eleccion en Don Pablo Travitaso que exercía igual cargo en la Villa
de Jauja con integridad y pureza: Correspondiendo el nombrado a mis deseos,
me arregló la Secretaría de un modo nada común, y en el tiempo que se sirbió
de tal acción quedé penetrado de su aptitud, pundohonor, justificacion, y des-
interés para el cargo, y consecutibamente lo nombré Defensor de Real Hacien-
da, y Promotor Fiscal de toda la Yntendencia, cuyo destino lo desempeñó con
aceptacion, y sin el menor emulomento. Posteriormente por los conocimien-
tos que tenía de su buen manejo, y pulso, lo llebe de Acesor al Cerro de Yauri-
cocha para arreglar por Mandato Superior los desordenes que iban destruyen-
do el importante cuerpo de minerías e interezes de dicho Cerro, en que me
sirbió con la exactitud, y escrupulosidad que me prometí. Quando en el año
de mil ocho cientos doce, se sublebaron los Partidos de Huánuco, Panatahuas,
y Huamalies, fué nombrado Auditor de Guerra de la Expedicion Pacificadora
que comandé por la misma razón de estar bien instruido de sus qualidades, y
circunstancias, las mas aparentes para el desempeño del destino, y en efecto se
expidió en quanto fué de su cargo con una contraccion tán empeñoza con un
zelo tán plausible, y con una integridad y acierto que le son tan propios que no

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