Page 126 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-3
P. 126
Volumen 3
Documentos de 1822
pues en Lima blasona mucho de los Governantes que son unos ladrones y no
le he visto exceptuar á nadie, y asi cuidado con el.
Los enemigos dicen que han pasado para Huancayo, ignoro hasta aho-
ra si se replegan en ese punto o se dirigen a Huamanga aunque he oido decir
que por bando se ha publicado que los enemigos pasan a Guamanga.
Tampoco ignorará Usted lo acaecido con el cura de Yanahuanca. Le
remito a Usted el expediente suyo y verá Usted que en mi concepto obró con
prudencia, pues receló justamente que estando en Chinche ellos se dirigiesen
a Yanahuanca mucho mas quando Rueda ebrio los insulto y les dijo que en la
quebrada habian de ser destrosados. Usted verá el expediente y hará lo que
convenga: quien me parece no debe existir tampoco en el curato es el de Cha-
cayán que no solo su apatia hace resfriar a sus habitantes sino que se produce
contra el sistema, y dice que no debe meterse en nada criticando a todos los
que emigran, y aun creo asegurando que son santos los enemigos.
Amigo: me he alargado mucho y quisiera extenderme mas, pero con-
siderandolo a Usted ocupado en su corte de Carampoma solo aspiro a que se
llene Usted de laureles y entre triunfante en Tarma que es lo que mas aspira su
afectisimo amigo y seguro servidor que su mano besa.
Isidoro Villar (Rubricado)
B.N.P. Mss. Correspondencia, s. cat.
1,172
Señor don Francisco de Paula Otero
Cerro Noviembre 15 de 1822
Amantisimo Compadre:
En mi anterior le doy parte a Usted de los acaecimientos durante el
tiempo del gobierno en el que puede tener Usted la satisfaccion de haverme
conducido como lo hé acostumbrado y ser propio de mi caracter: ya llegó a
esta el señor Villar quien recibio el mando sin la menor incomodidad, aunque
trae una carta orden a pedimento de Granados en que se abaluen los bienes.
del español emigrado Vivas: este mando por las autoridades me saca de tino,
por quanto ser con grave perjuicio del Estado, y las unicas esperanzas, donde
pudieramos sin perjuicio de el, restaurar nuestras perdidas, que por lo que
125