Page 568 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-2
P. 568
Volumen 2
Documentos de 1822
896
Tengo a la vista dos oficios con una misma fecha del dos del corriente
mes dirigido por Vuestra Señoría y enterado de ellos contesto al uno, que es
muy cierto estando de paso por el Pueblo de San Geronimo tome dicho cava-
llo almendrado por noticias ciertas y nada falsas de que este caballo hera uno
de los recolectados de esas quebradas por el oficial Manrique, quando este
se allaba con tal comision; este señor de los muchos que traiha dejo este por
mejor de todo, en su casa para su servicio obligado de mi escases como por
estas noticias traje dicho cavallo echando mano como intereses pertenecien-
tes al Estado, pero siempre con el fin de no ser cierta dicha denuncia, com-
prarlo del oficial Manrique, quien se halla con las partidas, y por este motibo
estoy aun sin desengañarme si verdaderamente es suyo o del Estado. Haora
pues que Vuestra Señoría asperamente me reconbiene por un cavallo, que su
entidad nada vale, estoy pronto a darlo ebitando se me siga sumario. Señor
Comandante mi onor, mi comportacion, mi limpio manejo es conocido a la
bista de todos mis gefes, y es el unico tesoro que en mi graduación conservo,
y conservare dando pruebas nada equibocas mientras biva bajo las banderas
libertadoras, y entre ellas observando la subordinacion beneracion y respeto
de mis Gefes.
Tocante al otro Vuestra Señoría me ordena mande a esa comandancia
quatro mulas aparejadas y el estado de la fuerza que tiene mi partida, para se-
gun eso mandarme las armas, contesto aserca de uno y otro al momento de mi
llegada a este punto de Yauli trate con el Mayor y Comandante NinaviIca para
que se me auxiliase con sus sobrantes armas mediante capitulo 4° de la ins-
truccion de Vuestra Señoria dada a mi fabor; obligado de esto como de mi em-
peño concediome dicho comandante darme sincuenta fusiles entre tercerolas,
asegurado de esto, y por hallarme algo enfermo hantesipe una orden a Chaca-
palpa, al subteniente Don Vicente Mendoza para que mediante mi orden me
esperase con toda la gente segun su lista, y al mismo paso me mandase quatro
mulas aparejadas para el trasporte de dichas hormas. Mañana sinco me dirijo
con veinte y tres fusiles y diez y siete tercerolas, sin piedras ni municiones pero
si con el dolor de esponer dichas armas, por la retirada del comandante Nina-
vilca y sus partidas, dejando los puntos que ocupaban sosteniendo las muchas
partidas que a cada momento los enemigos se abitaban, y al contemplar, que
567