Page 499 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-2
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
Guerrillas y montoneras durante la Independencia
Para realizar mi pretension, estoy pronto a presentar una informacion
de testigos circunstanciados, que informen y declaren sobre mi conducta, an-
tes y despues de la entrada del Ejercito Livertador en esta corte, quanto hayan
visto ó sepan de mi comportacion publica y privada, en prueba de mi decidida
adhesion al Sagrado sistema que defendemos, con expresion de los muchos
atrasos que he tenido en mis proporciones e intereses todo en servicio de la
Patria. Por tanto.
A Vuestra Señoria Ilustrisima pido y suplico que haviendo por presen-
tado la adjunta carta del Excelentísimo Señor Protector; se digne mandar se
me reciva la informacion de testigos que incluye la adjunta nota, y que llevo
ofrecida para calificacion de mis servicios y decidido patriotismo; que asi es
justicia que espero alcanzar de la integridad de Vuestra Señoria Ilustrísima
jurando en lo necesario no proceder de malicia.
Pedro José Bernuy (Rubricarlo)
(Al margen)
Lima y Julio 17/822. Por presentado con los documentos que se acom-
pañan, pase a la Junta de Purificacion.
Echague (Rubricado) F. Benavente (Rubricado)
Lima y Julio 18 de 822
Por recibido con el superior decreto marginal, y los respetables docu-
mentos que acompaña, que se tendrán presentes a su debido tiempo: pasese
este expediente para que los señores que se expresan informen á continuacion.
(Dos rúbricas) Cuellar (Rubricado)
El Coronel y Governador de la Ciudad de Santa Fee de Jauja en virtud
del apreciable presedente Decreto expongo: que el Presbitero Don Pedro José
Bernuy ha manifestado su adhecion a la independencia de America de un
modo singular y nada comun, inspirando a los provincianos de Jauja los justos
sentimientos de la causa; por cuya conducta se atrajo el odio de los jefes del
exercito enemigo; y para evitarse de su tirania, ha tenido que emigrar de aquel
valle en todas las ocaciones que han entrado á el las Armas del Rey: asi es que
en la primera invasion de Ricafort le saquearon su casa en una entidad bas-
tante considerable, cuyo monto de plata, ropa y demas menages, ascenderia
á once mil pesos, dejandolo en la ultima indigencia. Con atencion á este que-
branto y de su irreprehensible comportacion, se le nombró Cura provicional
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