Page 420 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-2
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Volumen 2
                                                                        Documentos de 1822
            y dirigiendonos a casa del capitan Bao, encontramos de facto en su poder el
            adjunto oficio del Gobernador del Cerro, que advirtiendo haber sido abierto
            violenta y recientemente pues aun estaba humeda la oblea: consultando por
            otra parte entre los tres sobre la influencia que podria tener en la tranquilidad
            publica de estos vecindarios lo contenido en el oficio; y finalmente contando
            yo como cuento con la indulgencia y consideracion que U. me dispensa resolvi
            imponerme como hise de la mencionada comunicacion. Por el estado de su
            doble oblea bendrá U. en conocimiento de la realidad de mi aserto.
                    Como la sospecha recaia reincidentemente en Bao, no tuvimos incon-
            veniente en denunciarlo al Señor Davalos; y en su consecuencia le ha manda-
            do venir preso.
                    Besa la mano de U. su muy afecto y reconocido servidor.
                                         Pedro Agustin Padilla (Rubricado)
                    El amanuense saluda con su mayor consideracion al Señor Presidente
            de Tarma y Besa Su Mano.
                                         Andres de Puyrredon (Rubricado)

                                   B.N.P. Mss. Correspondencia, s. cat.




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                    Junio 9
                    N° 4.
                    Son las doce del dia hora en que acabo de llegar á este punto con la
            Partida del Comandante Ninavilca compuesta de ciento cuarenta hombres ar-
            mados, y hago que marchen un pequeño número sobre el punto de la Oroya,
            y las demas tropas serán distribuidas en los puntos que sean más necesarios.
            Esta noche espero se me reuna la Partida de Don Luis Celedonio Gonzales
            que consta de doscientos hombres.
                    El enemigo ha pasado ya la Oroya con cerca de cuarenta mil cabezas
            de ganado que han robado a estos desgraciados habitantes: este pueblo ha sido
            saqueado: un cuadro de casas quemadas; las pocas alhajas de la Iglesia, entre
            ellas un copon con dose formas pequeñas, y una de renovación; destrozando
            todas las efigies del templo por quitarle los clavos y corona.





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