Page 213 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-2
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
Guerrillas y montoneras durante la Independencia
Excelentisímo Señor
Tadeo Tellez Sargento Mayor del Exercito Libertador en la via y forma
que mas aya lugar, y con el debido respeto ante Vuestra Excelencia paresco y
digo: Que habiendome ordenado por el Señor Presidente del Departamento
de Huaylas Mariscal de Campo don Toribio de Luzuriaga, para que me pre-
sentase al señor Ministro de la Guerra como manifiesta el oficio N° 1 sin ha-
cerseme saber la causa que hubiese dado para ello. A mi llegada a esta capital
lo hise como se me habia ordenado, acompañando a mi pasaporte un oficio
que desde Pachacoto diriji al señor Presidente viendo pues que sin embargo
que se habia pasado el termino que la ley previene, en tales casos, no se me
havia hecho saber la causa porque habia sido remitido a disposicion del mi-
nisterio presente a Vuestra Excelencia, por conducto de el un recurso acompa-
ñando varios documentos que consideraba necesarios para mi vindicación, si
acaso se me hubiese hecho alguna falsa calumnia, el que hasta el dia no se le ha
dado curso. El pueblo siempre murmurador, opina del modo que le parece mi
remicion a varias causas unos dicen que por cobarde, lo que me es sumamente
sencible, pues siempre he tenido la gloria de que mis xefes me miren al frente
del enemigo despreciando los mayores riesgos; otros por infidente a nuestra
sagrada causa esto traspasa mi corazon quando todo el mundo es testigo de
lo que he trabajado por la independencia de America, aun en los calabosos, y
algunos que por mala versacion en los intereses del Estado en mis goviernos,
esto mansilla mi honor que siempre he procurado mantener ileso, repaso mi
memoria, y no hallo que no he cometido ninguno de estos delitos, y asi repa-
so tranquilo en el testimonio de mi conciencia. Pero mientras se deside este
problema mi honor fluctua en la opinion publica. Si Excelentisímo señor y un
oficial de honor no puede dejar manchada su fama con tan negras imposturas
y si no tratase de vindicarme no seria digno de servir a las ordenes de Vuestra
Excelencia.
Como ni puedo penetrar la causa que haya motivado mi remicion,
me veo como un caminante que en la espesura de un bosque ha perdido el
camino y procura traer algunas señales que la conduscan a él, asi yo en la con-
fucion en que me hallo busco en mi correspondencia oficial los documentos
que me parescan pueden contribuir a sinserar su conducta de algun descuido
que involuntariamente hubiese cometido. Por lo que acompaño con el respeto
debido el documento N° 2 por el que aparese los motivos que me obligaron
a quedarme en Huaraz cuando fui conducido a el por el acaecimiento de los
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