COMISIÓN DE VENECIA PROPONE DIÁLOGO PARA SOLUCIONAR CRISIS
Estima que TC debe decidir si iniciativas de reforma constitucional pueden ser sometidas a una cuestión de confianza.
La Comisión de Venecia emitió hoy lunes su opinión respecto al sometimiento de reformas constitucionales a una cuestión de confianza.
En ese sentido, menciona que la controversia debe resolverse en un marco donde prevalezca la búsqueda de soluciones constitucionales adecuadas y en donde el presidente de la República y el presidente del Parlamento del Perú puedan llegar a un acuerdo.
La Comisión, entidad del Parlamento Europeo cuyas opiniones son relevantes y tomadas en cuenta en muchas ocasiones, estima que el Tribunal Constitucional (TC) del Perú debe cumplir un rol primordial para decidir si las iniciativas de reforma constitucional pueden ser sometidas a una cuestión de confianza, ya que “en el Derecho Comparado vincular reformas constitucionales a una cuestión de confianza es inusual”.
En opinión de esta entidad internacional del Derecho, cualquier proceso de reforma constitucional “debería preservar el principio de separación de poderes y el requisito de que existan pesos y contrapesos entre el Presidente y el Congreso”, puesto que “el poder del Presidente de someter una reforma constitucional a una cuestión de confianza podría crear el riesgo de que esta sea utilizada para alterar ese equilibrio”.
Por tanto, definen que la posibilidad de disolver el Congreso luego de un segundo voto de cuestión de confianza altera el equilibrio de poderes a favor del Presidente.
En el Perú”, sostiene la Comisión, “parecen existir algunos límites materiales a las reformas constitucionales, tales como la separación de poderes y el sistema republicano de gobierno, los cuales pueden constituir una garantía, pero sus alcances no están claramente definidos”.
Normalmente, expresa, una Constitución está diseñada para asegurar su “relativa permanencia, estabilidad, predictibilidad y continuidad, y los procesos de reforma tienden a ser extensos” y por ello modificarla es muy difícil.
De este modo, el reporte de la Comisión de Venecia sobre reformas constitucionales sugiere que estas deberían estar basadas en un amplio consenso y emprendidas con el debido cuidado y deliberación en el Parlamento, en concordancia con las ideas modernas de democracia, ya que alteran la norma suprema y fundamental del país.
